POR LAS FUENTES Y LOS PAISAJES DE JORCAS

UN NUEVO ITINERARIO PARA DISFRUTAR DEL ALTO ALFAMBRA

Desde hace unas semanas los amantes de los paisajes culturales disponen de un nuevo paseo que les permitirá conocer -o descubrir- el rico patrimonio que presenta Jorcas en su término municipal.

El Ayuntamiento, la Comarca Comunidad de Teruel y ADRI-Teruel (Programa LEADER) han realizado una ruta por el entorno del núcleo urbano de Jorcas que tiene dos centros de interés: las fuentes y los paisajes.

El recorrido puede practicarse en bicicleta o en vehículo a motor (no aconsejable en tiempos de lluvias) aunque estos medios no permiten ascender a la Muela. Para disfrutarlo mejor se recomienda realizarlo a pie pues así se son más intensas las vivencias y se facilita la integración personal en el medio.

Si se hace a pie y se accede a la Muela (muy recomendable) tiene una longitud de 7,7 km, un desnivel de 153 metros y necesita unas dos horas y cuarto. En este enlace se encuentra la ruta alojada en wikiloc desde donde puede descargarse.

El recorrido parte de un panel informativo situado bajo una noguera, entre el Ayuntamiento de Jorcas y la palanca sobre el arroyo del Regajo.

Además de los datos técnicos de la ruta, puede encontrarse interesante información sobre la historia del castillo, las fuentes y manantiales, la cueva donde tuvieron lugar unas famosas apariciones marianas, un peirón monumental y el yacimiento arqueológico de la Muela.

Hay que seguir las señales indicadoras que encaminan calle arriba dejando dejando a mano izquierda el peñasco del Picarezo

y a mano derecha la ermita de San José

… de la que ya se habló en esta sección de la web en un artículo dedicado al artista Francisco Moya.

Al subir la calle una serie de pequeños huertos cerrados con paredes de piedra y con puertas de madera irán quedando a la derecha, en su mayoría cubiertos de herbazales y colonizados por jóvenes árboles tras su abandono.

A la izquierda aparece la fuente del Gamellón, con cuatro bocas que surgen de un muro de piedra sillar y con su rectangular bacio …

… desde donde pasa el agua al contiguo lavadero municipal.

Junto a un chopo cabecero sale una senda que acerca a una pequeña cueva parcialmente oculta por la vegetación y los sedimentos. Allí tuvieron lugar en 1958 unas presuntas apariciones de la Virgen a unos niños que recogió -por entonces- la prensa, tanto de ámbito estatal (Blanco y Negro) como provincial (Lucha).

La pista -aún asfalatada- traza una cerrada curva y sigue ascendiendo dejando a un lado el cementerio municipal y ofreciendo una magnífica vista de la iglesia de Jorcas.

En seguida la pista, ya de tierra, se interna en el monte. Afloran estratos de margas y de calizas depositados en ambientes marinos durante el Cretácico Inferior en las que aparecen fósiles de protozoos (nummulites) …

o de moluscos (bivalvos) …

Al otro lado del arroyo del Regajo se extiende la Loma Larga de la Hiedra hacia el término de Allepuz. Es una ladera en la que asoman unos potentes estratos calizos inclinados que determinan un relieve en cuesta (modelado estructural).

En su superficie, el estrato calizo muestra unas grietas dispuestas de tal forma que componen una retícula de cuadrados o rectángulos de dimensiones métricas en las que prosperan las matas de erizo. Se trata de diaclasas.

El arroyo del Regajo incide sobre este resistente banco calizo creando un pequeño cañón con meandros encajados

… en cuyo cauce, en periodo de lluvias copiosas, se forman pozas y pequeñas cascadas

La pista sigue ascendiendo y pasa junto a un conjunto de tres balsas formadas por excavación sobre las margas grisáceas colonizadas por plantas acuáticas y palustres. Son conocidas como las balsas de San Simón.

A nuestra derecha se levanta el extremo de la Muela por cuya ladera remontan un conjunto de bancales.

Una pista surge a mano izquierda. Por ella continuaremos la segunda parte de la ruta. En ese desvío seguiremos por la pista que llevamos en dirección a la Muela y las fuentes de la Cerradilla y Marihueso.

Se pasa junto al corral

y al peirón de Loras

Construido con piedra sillas y levantado sobre dos escalones, este pilar fue levantado durante el siglo XVIII por la familia Loras, de Villarroya de los Pinares, estando en el camino histórico que unía Jorcas con esta localidad del Maestrazgo. Es uno de los pocos peirones de propiedad privada y sin culto religioso del Alto Alfambra.

Al poco aparece otro desvío. Tomando el camino de la izquierda se llega directamente a la fuente de Marihueso. En cambio, tomando el de la derecha se alcanza la fuente de la Cerradilla y se accede a la Muela. Es lo que recomendamos.

Tras una nave ganadera de nueva factura y en uso se llega a la fuente de la Cerradilla.

Un par de mesas invitan al descanso y a merendar en buena compañía.

Desde ella hay que ascender a la cima de la Muela a través de algún desdibujado sendero. Se trata de una alargada y estrecha planicie con orientación este-oeste que se eleva sobre el pequeño valle del Regajo.

La Muela tiene muchas lecturas.

La geológica, por la naturaleza de sus rocas calizas resistentes a la erosión miocena y por su interés geomorfológico al formar parte de la superficie de la erosión fundamental.

La arqueológica, por tratarse de los restos de una ciudadela de tiempo ibérico en la que, a pesar del maltrato durante la Guerra Civil y el expolio reciente, se adivinan los cimientos de las viviendas y los restos de las murallas. Al margen del hallazgo del tesorillo que se conserva en el Museo Provincial de Teruel no se ha realizado excavación alguna.

La florística, con sus prados de flor de primavera sobre los sustratos arcillosos y de erizo en las crestas rocosas.

La paisajística, al tratarse de un magnífico mirador del Alto Maestrazgo y de las sierras de Gúdar y de El Pobo.

Y, la de la reciente Guerra Civil, pues se adivinan las posiciones defensivas del ejército republicano y uno puede imaginarse el avance de las tropas franquistas desde la cercana Camarillas y Aliaga hacia Allepuz.

Se recomienda recorrerla con tranquilidad por todos sus rincones para disfrutar de todas estas lecturas y del silencio de este solitario monte.

Desde el extremo este puede descenderse hasta la fuente de Marihueso. Ambos manantiales se encuentran en el contacto entre las porosas calizas que forman la planicie rocosa y las impermeables margas que las soportan.

Junto a la fuente hay otra mesa de madera y las ruinas de un corral en cuyas paredes las piedras se mantienen milagrosamente …

Los bancales que cubren la ladera norte de la Muela mantienen unos setos arbustivos que reducen la erosión de los campos de labor, ofrecen hábitat a la vida silvestre y mejora el valor paisajístico.

Desde allí se toma el camino en dirección a la izquierda, de vuelta al pueblo volviendo a pasar cerca de la fuente de la Cerradilla, el peirón y el corral de Loras hasta llegar al desvío que encontramos en su momento y que ahora tomaremos.

La pista mantiene el nivel a media ladera entre el escarpe calizo de Las Paradas, otro estrato caliza que es paralelo al de la Loma Larga de la Hiedra, y el pueblo que se encarama cada vez más disperso.

En su primer parte recorre una amplia pista recientemente abierta -o ampliada- para instalar y acceder a una antenas de telefonía con notable impacto paisajístico por el movimiento de tierras.

A nuestra izquierda se muestra abrigado el caserío de Jorcas. El barrio Central, cerca de la plaza Mayor. El barrio Bajo, en las dos entradas del pueblo. El barrio del Castillo, probablemente el núcleo más antiguo. Y, el más encaramado a la ladera que recorremos, el barrio de Peñas Royas.

El nombre de Peñas Royas le viene por el afloramiento de un estrato de areniscas rosadas que llegan a formar un pequeño escarpe. Estos materiales geológicos han sido muy aprovechados para obtener sillares utilizados en la arquitectura popular.

La pista alcanza un nuevo panel

dedicado a los valores naturales y paisajísticos del término de Jorcas …

La vista del bosque ribereño que prospera junto al arroyo de Regajo es espléndida. Este bosquete forma parte de la Arboleda Singular «Ribera de Chopo Cabecero». Hacia el oeste se levanta la sierra del Pobo. Y, más cerca, se pueden ver Ababuj y Aguilar del Alfambra.

Algunas tardes de invierno, los cielos son de especial belleza …

La pista continúa alejándose del pueblo durante un buen tramo entre pastizal de tomillo y aliaga y una fallida plantación de pino negral. Justo antes de iniciar la vuelta encontraremos una majada que aún es utilizada por el ganado.

La pista comienza a descender y vuelve en paralelo hacia el pueblo, ahora por debajo del estrato de arenisca rosa y entre campos de cultivo de secano.

La entrada en el pueblo permite disfrutar de otros múltiples detalles de la arquitectura popular en viejas majadas, pajares y viviendas …

… en los que no faltan buenos trabajos de carpintería

e incluso de forja

Y así, iremos entrando al pueblo que igualmente merece la pena recorrer con detalle. Os animamos a realizar esta nueva ruta con la que cuenta Jorcas.