CONSTRUCCIÓN DE UNA VELETA Y PINTURA DE UN MURAL HISTÓRICO
DOS INICIATIVAS DIFERENTES EN MONTEAGUDO DEL CASTILLO, PERO UN MISMO OBJETIVO
El pasado mes de agosto, la Asociación Cultural de Monteagudo y la Agrupación Amigos del Pairón desarrollaron de forma conjunta, y como viene siendo habitual, un intenso programa de actividades culturales consistente en marchas senderistas, conferencias, etc…
Todas ellas revisten importancia no solamente porque fomentan un mejor conocimiento del paisaje, como es el caso de las marchas senderistas, o de la historia del municipio, en el caso de las conferencias, sino porque además permiten compartir momentos y experiencias entre todos los participantes. Me gustaría resaltar dos actividades que se han llevado a cabo y que en opinión de quien suscribe estas líneas son muy reseñables.
Por un lado, hablaremos de la instalación de una veleta de siete metros de altura, actividad promovida por la Agrupación Amigos del Pairón. Se ha colocado en el cerro de La Fuente, un extraordinario paraje desde donde se puede observar una espectacular vista del pueblo y de los alrededores.
Solamente el poste mide 5 metros de altura y sobre éste se ha colocado la veleta de 2 metros de altura adicionales que culmina con el emblema tradicional de la Agrupación, la imagen del caminante con un bastón y gorra.
Sobre el poste sobresale un brazo de hierro y aunque todavía no está puesto, os adelanto que se colocará un pendón con el sello del consejo de Monteagudo del siglo XV, sobre fondo granate y letras de color dorado, con la siguiente inscripción: “Segel del Consel de Montagod”, representando el escudo con las barras de Aragón en el centro, flanqueado a ambos lados por dos torres almenadas.
El mecanismo por el que funciona la veleta es bastante sencilla ya que posee un eje pivotante y un señalador (flecha) de la dirección del viento. La flecha está colocada sobre el eje y distribuye su peso de forma equilibrada. Dispone de un puntero en la parte que menor resistencia al viento ofrece para que sirva como indicador de la dirección del mismo. En consecuencia, cuando el viento sopla, la parte que menos resistencia ofrece al aire nos indicará el sentido del que viene.
La veleta es visible desde el pueblo, y no solamente va a permitir conocer la dirección en la que sopla el viento, sino que además constituye un atractivo turístico más en la zona y en el municipio, junto con otras actuaciones llevadas a cabo por la Agrupación, como son el reloj solar y la rosa de los vientos.
Otra de las actividades realizadas, en este caso por la Asociación cultural de la localidad, es el mural colaborativo que representa la batalla del Campo de Monteagudo en el año 1190 entre las tropas de los reinos de Aragón y Castilla.
El mural ha sido diseñado por la ilustradora Elena Castillo, y financiado íntegramente por la Comarca Comunidad de Teruel, contando con la participación de los vecinos a la hora de pintarlo.
En agosto de 2021, el doctor e investigador en Historia D. José Luis Castán Esteban ofreció una charla donde explicó los pocos datos que se conocen sobre la batalla del Campo de Monteagudo que tuvo lugar en el año 1190, entre Castilla y Aragón, y en el que fue capturado el sobrino del Cid, D. Pero Bermudo. Para el ponente, fue a raíz de la batalla y de la captura de D. Pero Bermudo, cuando se representó a todos los reyes de Aragón con la espada del Cid, la conocida como “Tizona”.
Es por eso, por lo que se ha intentado con un tono épico narrar la batalla en el propio mural, gracias a la aportación de Eliseo Guillén con su poema, que a continuación reproduzco.
“Año de Nuestro Señor de 1191
¡Bravo al Campo de Monteagudo!
Hidalgo, escudero o niño.
empuñó espada.
Unióse todo valiente aragonés
presentando singular batalla
para defensa de esta tierra es.
Castilla como propia la quiere.
Aragón por ella se bate y muere.
Su furia desata
Y a las huestes de Castilla mata y mata.
¡Ya huyen por el barranco tus huestes
Pero Bermudo,
dejándote solo
con tu Tizona luchando!
Espada jamás doblegada
y por recios brazos siempre portada.
Aquí, con honra se rinde Tizona,,
la espada del mundo faraona.
Para Monteagudo fama
Para Aragón gloria
Para la historia memoria”.
Lo cierto, es que hubo una gran participación de público de todas las edades, mayoritariamente niños, que pudieron colaborar pintando una parte importante de la historia del pueblo.
El visitante podrá disfrutar del mural conmemorativo de la batalla en la fachada de las antiguas escuelas.
Este mural viene a embellecer el pueblo, junto con las nueve lonas de fotografía costumbrista de grandes dimensiones de los años 40 a 60 y la escultura del gallo realizada por el artista José Azul que da actualmente nombre a una plaza.
Las dos actividades a las que hemos hecho alusión, si bien son distintas, creo que tienen un fin común, hacer partícipe a los vecinos de la vida cultural, compartir momentos y experiencias, crear nuevos espacios para el desarrollo turístico y fundamentalmente fomentar una visión positivista del pueblo.
Esta visión positivista a través de la participación, del conocimiento del entorno y del paisaje, viene siendo desarrollada de una forma extraordinaria por el Parque Cultural del Chopo Cabecero del Alto Alfambra, al cual pertenece Monteagudo del Castillo.
Estas iniciativas que he descrito, si bien se han desarrollado en nuestro pueblo promovidas por sendas Asociaciones, deben sumarse a las iniciativas que viene realizando el citado Parque Cultural no solamente aquí, sino en los municipios de nuestro alrededor.
Aunque se han realizado en época estival también es cierto que, en el caso de Monteagudo, se vienen desarrollando actuaciones en época de presencia de población, ejemplo de ello fueron las jornadas sobre emprendimiento, ganadería y agricultura organizadas por la Asociación cultural y la Agrupación Amigos del Pairón hace ya algunos inviernos, y que contó con el patrocinio del Parque Cultural del Chopo Cabecero del Alto Alfambra.
En la conocida como España Vaciada, surgen iniciativas y proyectos que merecen el apoyo y el reconocimiento de todos, y que dan un hilo de luz a un panorama difícil de afrontar, y este es el ejemplo de ello.
Pablo E. Guillén Campos (Monteagudo del Castillo)