ESCAMONDA DE ÁRBOLES TRASMOCHOS. INVIERNO 2021
INICIATIVAS DE LOS AYUNTAMIENTOS DEL ALTO ALFAMBRA
Los chopos cabeceros son el resultado aplicar la técnica del trasmocho al chopo o álamo negro (Populus nigra), árbol autóctono en las vegas y bosques galería de la cuenca hidrográfica del Júcar. El trasmocho es una técnica cultural basada en la realización de podas de todo el ramaje del árbol a intervalos de entre 10 a 20 años, a suficiente altura del tronco para que el rebrote resulte inaccesible al diente del ganado.
Esta técnica estimula el rebrote y la formación de ramas jóvenes sobre árboles viejos e incluso muy viejos, que de este modo adquieren el singular porte que los embellece, llegando a multiplicar su longevidad natural, formándose gruesos troncos con abundantes huecos que alimentan y refugian a una compleja comunidad biológica, en buena parte incluida en los catálogos de especies amenazadas.
Practicado desde hace siglos y transmitido entre generaciones, el trasmocho ha permitido compatibilizar la obtención de vigas madera, leña y forraje con el aprovechamiento de los pastos de su entorno, formando un ecosistema tradicional agroganadero, de especial valor ecológico.
Las formas “en candelabro”, propias de los árboles trasmochos, destacan como una característica esencial y propia de los paisajes rurales en los que se ha venido aplicando desde tiempo ancestral. Paralelamente, la herencia del trasmocho se integra en la identidad cultural de muchos pueblos de Europa, con importantes implicaciones en la etnobotánica, la arquitectura tradicional, las técnicas artesanales y los conocimientos sobre la naturaleza.
El trasmocho ha sido un sistema común y tradicional de aprovechamiento de los chopos y otras especies de árboles ribereños en la cordillera ibérica, especialmente en la provincia de Teruel, que hoy alberga las mayores formaciones de chopo cabecero que existen en Europa, concentradas sobre todo en las riberas de los ríos Martín, Guadalope, Aguasvivas, Pancrudo y Alfambra.
En reconocimiento a estos valores, el Gobierno de Aragón declaró en 2016 como Bien de Interés Cultural Inmaterial a la cultura del chopo cabecero en el sur de Aragón (Decreto 175/2016). Y para preservar y poner en valor este importante patrimonio, igualmente, el Gobierno de Aragón aprobó el 24 de abril de 2018 la declaración del Parque Cultural del Chopo Cabecero del Alto Alfambra, a través del Departamento de Educación, Cultura y Deporte (Decreto 69/2018). Este parque cultural integra la totalidad de los términos municipales de Ababuj, Aguilar del Alfambra, Allepuz, Camarillas, Cedrillas, El Pobo, Galve, Gúdar, Jorcas y Monteagudo del Castillo.
Los actuales chopos cabeceros y los sauces trasmochos son herencia de las generaciones anteriores, que los plantaron, cuidaron y aprovecharon durante siglos. Pero los cambios sociales y técnicos de las últimas décadas han provocado el fin del aprovechamiento de sus vigas en la arquitectura popular y de sus hojas como alimento del ganado. Por falta de rentabilidad en el aprovechamiento de su madera, la leña es el único uso que queda para las ramas podadas, y cada año es menor por la dureza y dificultad de los trabajos de desmoche, el éxodo rural, el envejecimiento de la población y el uso de otros sistemas de calefacción.
Al ser el resultado de las podas periódicas, cuando dejan de podarse los chopos cabeceros y los sauces trasmochos pierden los efectos que benefician su vigor y estabilidad, entrando en un proceso decaimiento que acaba con la muerte y el colapso del árbol.
Y la consecuente pérdida de valores se agrava por la inexistencia de nuevos ejemplares de jóvenes trasmochos que los puedan sustituir.
Al ser artificiales sus formas e incluso su longevidad, todos los chopos cabeceros y sauces trasmochos que dejan de podarse acaban perdiéndose a medio plazo. Y ante esta certeza, ha de afrontarse el hecho de que el 80% de los chopos cabeceros del sur de Aragón hace ya más de 20 años no se han podado a causa del abandono de los aprovechamientos tradicionales. Hoy los trasmochos son árboles amenazados, al igual que sus valores ambientales y culturales.
Ante la evidente prioridad de mantener los trasmochos los ayuntamientos que forman parte del Parque Cultural del Chopo Cabecero del Alto Alfambra iniciaron en 2020 un programa de podas de chopos cabeceros y de sauces trasmochos en sus términos municipales que permitió escamondar 297 árboles.
Esta iniciativa ha vuelto a ponerse en marcha en 2021. A lo largo de los meses de febrero y de marzo unos 140 chopos y sargas trasmochas han sido desmochadas y sus vigas convertidas, no sin esfuerzo, en tarugos. Algo más de una veintena han quedado por hacer dejándose para el otoño.
La mayoría de estos árboles se encontraban a lo largo de la ribera del río Alfambra. En muchos casos formando parte de formaciones adehesadas, como en el Mas de Caudé (Allepuz) …
o de los prados del Cuadrón (Aguilar) …
En otras ocasiones se trataba de alineaciones de árboles, como los del Molino Alto (Gúdar) …
o las de la partida de La Torreta (Allepuz).
A veces se trata de árboles aislados, como este formidable ejemplar situado a la altura del Mas de la Granja (Gúdar) …
Muchos de estos árboles perdieron el turno de desmoche hace décadas, por ello presentan vigas de grandes diámetros …
… con anillos externos muy finos por la disminución de la producción neta.
Algunos de los árboles desmochados se encuentran en las acequias que derivan del río Alfambra, como la que pasa por la Masía de las Pupilas (Allepuz) …
Otros crecen en las orillas de arroyos que desembocan en el río Alfambra, como el barranco de las Cuerdas (Aguilar) …
Mientras que otros son chopos de manantial, como los que crecen junto a la fuente de Las Callejuelas (Ababuj) …
En la vertiente del río Mijares, en el término de Cedrillas, también han sido podados algunos ejemplares, tanto en la vega del río …
como en las ramblas que en aquel desembocan, como el arroyo de los Morteros …
o el que alberga un formidable ejemplar que llama la atención al acercarse a Cedrillas …
Dentro de unas semanas las yemas durmientes situadas en la cabeza o aquellas próximas a la zona de corte se activarán y ramilletes de ramillas surgirán en estos árboles, renovando el ramaje y aumentando su vitalidad.
Pero eso ya será bien entrada la primavera.