EL BOSQUE ENCANTADO

ARAGÓN TELEVISIÓN, VIERNES 20 DE OCTUBRE 21.45H

Una tercera parte de la superficie de Aragón está cubierta por bosques. Carrascales, sabinares, robledales, hayedos, abetales, pinares o choperas pueblan valles y montañas. Estos bosques son, además de valiosos ecosistemas, lugares de leyenda y asiento de formas de vida únicas.

«El Bosque Encantado» es un programa que esta temporada ha estrenado Aragón TV. Se adentra en algunos de los bosques aragoneses más representativos con el propósito de compartir sus secretos pero también con el de mostrar a las personas que los conocen y que los viven, aquellas que atesoran una sabiduría a partir de su convivencia con el bosque. Es un homenaje a la Naturaleza y a toda la gente que vive en armonía con ella.

Este programa lo dirige y presenta Mariano Navascués, un buen conocedor del Parque Cultural del Chopo Cabecero del Alto Alfambra pues al mismo dedicó cuatro capítulos de «Chino-Chano«, el popular programa de senderismo.

Mariano no está solo. Está muy bien acompañado por un gran equipo de productores, realizadores y otros profesionales de Factoría Plural.

«El Bosque Encantado» se emite los viernes, a las 21.45 horas, en Aragón TV. Ya van tres capítulos: el Pinar de Rodeno de la sierra de Albarracín, el hayedo del Moncayo y el hayedo-pinar de San Juan de la Peña. Pueden verse pulsando en este enlace.

Hay muchos, muchísimos, bosques aragoneses valiosos. Por su extensión, por su madurez, por su interés ecológico o por su importancia cultural. En esta primera etapa se han seleccionado doce bosques encantados y uno de ellos es la chopera del Alfambra. Para las personas que amamos este valle es una gran alegría ver cómo se difunde un paisaje tan valioso como poco conocido.

Los pasados 2 y 3 de octubre estuvo grabando el equipo de «El Bosque Encantado» en la ribera del río Alfambra en los términos municipales de Ababuj, Allepuz, Jorcas, Camarillas, Galve y Aguilar del Alfambra.

La chopera del Alfambra, en rigor, no es un bosque. Es una arboleda formada por miles de árboles trasmochos, los chopos y los sauces cabeceros, y un estrato herbáceo. Es un paisaje cultural. Un paisaje modelado por el ser humano para producir madera de obra y leña, y para aprovechar los pastos por el ganado sobre unos terrenos susceptibles de inundarse durante las crecidas. Es un pasto arbolado y presenta una estructura adehesada.

Por eso, el programa ha puesto la mirada en los árboles …

y en sus habitantes. Y, entre ellos, no pueden faltar las ovejas ….

… y los ganaderos que las cuidan y que, indirectamente, son los creadores de estos paisajes y de todo lo que hay detrás.

Por ello, una de las entrevistas fue dedicada a un ganadero. José Luis Hernández, de Galve …

… explicó el uso de los pastos cercanos al río, el manejo del ganado y la adaptación de una actividad antiquísima como el pastoreo a la economía y sociedad actual.

Todos los chopos cabeceros del valle han sido plantados, escamondados y aprovechados por personas. Todos son propiedad de alguien. En el pasado eran un recurso económico. En un terreno con un clima muy difícil la gente tenía que aprovechar con inteligencia los recursos naturales. El cuidado de los chopos cabeceros es un claro ejemplo de integración en la producción agrícola, ganadera y forestal. Es un modelo agrosilvoganadero.

Por eso, la perspectiva de quien ha aprovechado estos árboles, para vender sus ramas como vigas o para obtener la leña con la que calentarse durante los largos inviernos, era necesaria traerla al programa. Amparo Pérez y Martín Gascón, masoveros de Cerrito Bajo (Camarillas) …

… son los propietarios de una chopera cercana al Molino Barberán que aprovechan para obtener la leña que consumen en su masía. Martín sabe mucho de estos árboles pues cuando era joven los escamondaba con una segur subiéndose a la cabeza. Hace unos años aún se animó a recordar aquellos trabajos grabando con «Aquí la tierra».

En el valle del Alfambra, sobre todo en su cabecera, hay unos 23000 álamos negros trasmochos. Cada vez hay menos personas que cuiden de sus árboles, que los escamonden y que se aprovechen de su madera. La emigración, el envejecimiento de la población, los cambios en las técnicas y materiales de construcción y en las de calefacción doméstica son la causa de que muchos de ellos hayan perdido el turno de poda. Y eso es un problema. Pero aún hay personas que se preocupan de ellos aunque, como ya son mayores, no pueden podarlos personalmente.

Por suerte hay personas, como Herminio Santafé, que saben escamondar los chopos y las sargas. Con motosierra, con medidas de seguridad y con la atención que merecen estos árboles centenarios. Herminio es el protagonista de otra entrevista.

En la actualidad los chopos cabeceros ya no son importantes en las economías familiares del Alto Alfambra. Sin embargo, siguen formando parte del paisaje personal y se encuentran en el corazón de sus habitantes.

El Árbol Europeo del Año es un concurso anual que se celebra desde 2011 con el objetivo de encontrar el árbol más significativo, remarcable o histórico de Europa. Se valora especialmente el significado que tiene el árbol entre las personas que viven en su entorno. Lo organiza la Asociación de Sociedad Medioambiental (EPA) y la Comisión Europea. España no participaba en dicho concurso hasta que la Plataforma Aguilar Natural y el Centro de Estudios del Jiloca promovieron en noviembre de 2014 la candidatura del Chopo del Remolinar, un chopo cabecero de Aguilar del Alfambra, al concurso Árbol Europeo del Año 2015. Este árbol era el representante de los chopos cabeceros del valle del Alfambra, de su historia, su cultura y su paisaje. Y fue el primer representante español en dicho concurso.

La votación comenzaba el 1 de febrero de 2015 y duraba hasta el fin del mes. Una exhibición viva, on-line de los votos lanzados para cada árbol se fue mostrando hasta la última semana de febrero, cuándo los finalistas más votados se mantienen en secreto. Fue un concurso muy emocionante en el que un árbol desconocido de un pequeño pueblo de Teruel consiguió recibir la atención de muchísimas personas. Tantas que recibió el tercer puesto.

Mª Jesús Rambla, vecina de Aguilar del Alfambra y representante de Aguilar Natural recibió en Bruselas, en el Parlamento de la Unión Europea, un reconocimiento para el Chopo del Remolinar.

Precisamente toda esta historia es de lo que trata la entrevista que Mariano le hizo a Mª Jesús, bajo la frondosa copa de este monumental y singular chopo.

En 2017 el Gobierno de Aragón declaró al Chopo del Remolinar como Árbol Singular de Aragón. Y, en paralelo, los tramos de bosque de las riberas del Alfambra comprendidos entre el límite de los términos municipales de Allepuz y Jorcas y el Estrecho de Aguilar del Alfambra, así como el del Regajo de Jorcas, fueron igualmente declarados como Arboleda Singular de Aragón Ribera de Chopo Cabecero del Alfambra. Un año después, el 24 de abril de 2018 el Gobierno de Aragón declaraba el Parque Cultural del Chopo Cabecero del Alto Alfambra para reconocer el enorme valor cultural y ambiental de este valle.

De estos reconocimientos pero, sobre todo, del valor cultural, ecológico, científico, histórico y de sus posibilidades económicas como elemento patrimonial de los chopos cabeceros trató la entrevista de Mariano Navascués con Chabier de Jaime.

El vínculo entre Chabier y los chopos cabeceros del Alto Alfambra es muy fuerte. Ha sido el lugar de estudio y el tema de su tesis doctoral, el destino de las excursiones con sus alumnos del IES Valle del Jiloca, la celebración de la primera Fiesta del Chopo Cabecero, la candidatura al Árbol Europeo del Año 2015 y, especialmente, su lugar de trabajo como gerente del citado parque cultural hasta suponer el broche de su trayectoria profesional.

Pasado mañana, el viernes 20 de octubre y a las 21.45 horas, será emitido el capítulo dedicado al Parque Cultural del Chopo Cabecero del Alto Alfambra dentro del programa «El Bosque Encantado» (Aragón TV).