UN PASEO INTERPRETATIVO DEDICADO AL VALOR AMBIENTAL DEL CHOPO CABECERO

LA RIBERA DEL ALFAMBRA ENTRE JORCAS Y AGUILAR

Las riberas del Alto Alfambra albergan una espléndida arboleda de chopos cabeceros. Posiblemente, una de las más extensas, continuas y cuidadas de Europa, sino del mundo. Es el resultado de un aprovechamiento agrosilvopastoril tradicional que ha suministrado madera de obra, forraje y combustible a las comunidades campesinas locales, en unos territorios en los que los bosques originales desparecieron de las montañas hace ya siglos por la presión ganadera y la rentabilidad de la lana.

Estos singulares cultivos forestales de chopo negro y sauce blanco, especies autóctonas ambas, servían también para fijar el trazado del río asegurando la protección de los campos contiguos antes las episódicas crecidas. Por otra parte, en aquellos parajes afectados regularmente por las inundaciones del Alfambra, los vecinos también plantaron estos árboles y los hicieron trasmochos aprovechando los frescos prados y creando unos pastos arbolados, verdaderas dehesas fluviales, ante la imposibilidad de ponerlos en cultivo.

La aplicación del desmoche de estos árboles trasmochos ha permitido conformar un singular soto fluvial con cientos y cientos de chopos y sauces centenarios.

Por ser representativo de una práctica campesina amenazada y por su singularidad paisajística, el Departamento de Desarrollo Rural y Sostenibilidad, mediante la Orden DRS/165/2018 declaró la Arboleda Singular de Aragón «Ribera de Chopo Cabecero», por un lado, al tramo del río Alfambra comprendido entre el límite de los términos municipales de Allepuz y Jorcas con el Estrecho de la Virgen de la Peña, en Aguilar del Alfambra, así como al de su afluente el arroyo del Regajo entre el núcleo urbano de Jorcas y su desembocadura.

La compañía de árboles añosos de sugerentes formas, la sinfonía primaveral de las aves del bosque forestales en primavera, la sombra que proyecta el follaje durante el verano, los paisajes amarillos de las ramas y de suelo a lo largo del otoño, el frescor del agua en todo momento hacen que los caminos que recorren estas riberas sean muy atractivos para el paseo. De hecho, el camino que une Jorcas, el molino de Ababuj y Aguilar del Alfambra forma parte del Sendero de Pequeño Recorrido (PR-TE 51) de la Ruta de la Virgen del Campo. Sendero que, en poco tiempo, dará continuidad al GR-199 Ruta de los Chopos Cabeceros del Alto Alfambra.

El Fondo de Inversiones de Teruel, en su convocatoria de 2017, recogió una partida económica para fomentar las rutas turísticas en riberas con chopo cabecero que, finalmente, se invirtió en el Parque Cultural del Chopo Cabecero del Alto Alfambra, para dar impulso a un proyecto que estaba dando sus primeros pasos. Con ella se instalaron señales informativas del Parque en los accesos a los núcleos urbanos y se realizó el proyecto y la ejecución del tramo del citado GR-199 en los términos de Gúdar y Allepuz.

Quedaba pendiente una tercera infraestructura. La instalación de una colección de seis paneles dedicados a dar a conocer los valores ambientales de los chopos cabeceros. Es decir, la creación de una ruta temática a lo largo del citado tramo del PR-TE 51 (y futuro GR-199).

Desde hace unos meses es ya una realidad.

Partiendo de Jorcas, el primer panel se encuentra en la fuente de los Yermos, un paraje precioso con un bosquete de chopos cabeceros y sauces trasmochos maduros que además dispone de un merendero.

Está dedicado a presentar la excepcionalidad que supone una arboleda como la del Parque Cultural formada por miles de álamos negros trasmochos, cuyos autores y propietarios han sido las generaciones de labradores que los han cuidado y aprovechado, la problemática actual debida a su abandono y la necesidad de ir buscando nuevos usos para dichos árboles.

Poco antes de que el arroyo del Regajo aporte sus aguas al río Alfambra, en un paraje en el que abundan los prados cerrados con árboles y arbustos que recuerda al paisaje de bocage de las campiñas atlánticas.

Este panel está dedicado al paisaje cultural del Alto Alfambra conformado por páramos ganaderos y arboledas de trasmochos de chopo y sauce. Un paisaje característico de algunos valles de la cordillera Ibérica y que se ajusta fielmente a la definición de paisaje cultural establecida en la Convención del Patrimonio Mundial de la UNESCO. Una paisaje histórico, que concede identidad a un territorio, que se manifiesta de forma diversa y que ofrece una imagen cambiante a lo largo del ciclo anual.

El Alfambra tiene un enorme interés bajo un punto de vista hidrológico. Es un río vivo. Uno de los de mayor recorrido con un funcionamiento más natural al carecer de presas que alteren su dinámica. El tercer panel está dedicado a este «río-rambla«, para remarcar su régimen marcadamente mediterráneo. Por ello, está ubicado en el meandro que se encuentra junto al molino de Ababuj, uno de los parajes más hermosos de este territorio.

En este panel se describe la singularidad geográfica del río Alfambra, el clima de este territorio y su relación con el régimen hidrológico, destacando su naturalidad.

Los chopos cabeceros son ecosistemas en si mismo. Insectos comedores de madera muerta y de hojas; hongos que descomponen la celulosa y la lignina, arácnidos que se alimentan de insectos; algas, líquenes y musgos que usan el soporte de las cortezas; murciélagos, roedores o mustélidos que se refugian en los huecos. Y multitud de aves forestales que encuentran en estas riberas unos verdaderos oasis …

El valor ambiental de estos árboles trasmochos es el tema al que se dedica el cuarto panel.

Y se ha instalado en el paraje de las Cerradas de Aguilar, entre los campos con cerca de piedra seca y espino y la frondosa ribera …

El quinto panel está colocado unos cientos más abajo siguiendo el sendero (PR-TE 51) y el curso del río. Justo en la confluencia de los términos municipales de Jorcas, Ababuj y Aguilar del Alfambra. Y, en el margen de una espléndida dehesa fluvial.

Explica brevemente las transformaciones que se han producido en el paisaje del Alto Alfambra a lo largo de la historia por la acción del ser humano. De la composición de los bosques primigenios, tanto en los montes como en las riberas, hasta la formación de los páramos ganaderos y de los pastos arbolados con trasmochos de chopo y sauce en las riberas.

Y, por último, el sexto panel está colocado al pie del Cerro de Aguilar, en la partida del Remolinar, muy cerca de uno de los Árboles Singulares de Aragón: el Chopo Cabecero del Remolinar.

En este panel se explica qué es un Árbol y una Arboleda Singular de Aragón, por qué los son el del Remolinar y el tramo de ribera que hemos recorrido. Y se expone la confluencia de objetivos entre esta figura de protección ambiental y el Parque Cultural.

El camino que une la localidad de Jorcas, el molino de Ababuj y el estrecho de Aguilar era hasta hace unos meses un precioso paseo apto para el senderismo. Ahora, además es una ruta interpretativa sobre el valor ambiental de los chopos cabeceros. Un museo al aire libre.